
Ya existió el mismo problema en quincenas anteriores, pero ante la advertencia del sindicato de no permitir continuar con las grabaciones, la empresa regularizó los pagos correspondientes.
Según el convenio colectivo de la asociación, el cobro del salario debe realizarse en tiempo y forma, pero en ésta como tantas otras veces no ocurrió así, y ante la no respuesta de la empresa a la intimación se vio obligada a tomar una drástica determinación.
El inconveniente más importante, según el gremio que ampara la labor actoral, es que dentro de los trabajadores que aún no recibieron su salario se encuentran los actores que trabajan a bolo, que son la parte más necesitada de la profesión.
“Este tipo de acontecimientos no ayudan a mantener la paz social, que es invocada y exigida sin fundamentos por ATA y CAPIT (las cámaras que agrupan a las empresas) al momento de atender nuestros reclamos cotidianos para defender el salario, los descansos, nuestro convenio colectivo de trabajo y los usos y costumbres favorables a los derechos de los actores/actrices”, sostiene el consejo gremial de la asociación.
Fuente: Asociación Argentina de Actores.
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